Carta a Josefa, mi abuela, José Saramago
En este mundo en que vivimos la carta que Saramago escribió a su abuela en 1968 me parece de plena actualidad y un buen punto de partida para una reflexión sosegada y profunda. Por eso, la he traducido al castellano y os la ofrezco a continuación. José Saramago publicó l a crónica Carta a Josefa, mi abuela en el periódico A Capital , de Lisboa, en 1968 . Años más tarde, se publicó en el libro Deste Mundo e do Outro . Ojalá su lectura os hable con palabras que sean vuestras. Texto original: José Saramago. ÍndigoHorizonte 25-08-2017, de la imagen, la introducción y la traducción . Reedición: 03-02-2024 Tienes noventa años. Estás mayor y dolorida. Me cuentas que fuiste la joven más bella de tu época — y yo te creo. No sabes leer. Tienes las manos hinchadas y deformes, los pies maltrechos. Sobre la cabeza llevaste toneladas de paja y leña, baldes llenos de agua. Viste salir el sol todos los días. Con todo el pan que amasaste se podría haber hecho un banquet
Ay, Nuria. Ésta me parece mucho más bella aún; quizá sea el colorido que emana de ella y que parece dotarla de vida, como si la hubieses atrapado el alma y hubiera quedado prendida en la foto. Un abrazo.
ResponderEliminarRealmente preciosa.
ResponderEliminarEsta hoja que parece un espejo en el que se reflejan las alas, hace de la imagen una grandiosa composición llena de color.
Un abrazo Núria
... y sin embargo esas alas parecen una sola.
ResponderEliminarCuando eche a volar surgirán las dos.
Un abrazo, Nuria.
Esta es aun mas hermosa que la otra, Nuria, Me gusa la nitidez del insecto y l hoja. Muy bien conseguido!!!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Me gusta la imagen, Un abrazo¡¡
ResponderEliminarComo las quieres...No puedes negar que son tus preferidas!!
ResponderEliminarPuedes pasear por Lisboa:))
Buen fin de semana.
Un beso.
Siempre la dualidad. Siempre la muestra descarnada de una u otro posibilidad. Y siempre el valor, la voluntar y el arrojo de las personas para elejir aquello que más nos emocione.
ResponderEliminarUn abrazo enorme Indigo de mis entrañas.
Y en la infinita dualidad, la unidad de la vida y de la concepción de nuestros sueños y sentires. No somos blanco o negro; ni buenos, ni malos; ni abiertos, ni cerrados. El circulo se cierra cuando se libera las toxinas de uno, para dejar volar el alma en paz.
ResponderEliminarBesitos y abrazos.
MARAVILLOSO!!!!!
ResponderEliminarBESOS
Parece que es de metal, preciosos brillos en ese azul eléctrico. Muy bonita también.
ResponderEliminarSaludos
Esta macro es una verdadera delicia, que belleza...! Besos.
ResponderEliminarPreciosa y delicadísima imagen Núria.
ResponderEliminarme encanta.
Abraçades