A mi casa usted vendrá... de Jacques Prévert
Al menos tres grandes pasiones mías han ido conformando gran parte del imaginario de este blog desde que nació en 2010: la poesía, la traducción y la fotografía. La fotografía es mi devoción más joven: su primer guiño lo recibí en 2008. La palabra y la poesía han formado parte de mi universo desde que tengo recuerdos. La traducción llamó por primera vez a mi puerta a los 14 ó 15 años, cuando traduje un extracto de la Eneida del latín al castellano.
Hoy os dejo una entrada retrospectiva con mi traducción de uno de los poemas que forman parte de la cabecera de este blog: Dans ma maison tu viendras... del poeta francés Jacques Prévert. En esta entrada de 2010, solo incluí el inicio y el final del poema. Luego, en otra entrada de 2014, traduje el poema completo y lo acompañé de dos imágenes en las que se puede apreciar la evolución en mis fotografías.
Así comienza el poema:
A mi casa usted vendrá
En realidad no es mi casa
No sé de quién es
Entré sin más un buen día
No había nadie
Solo unos pimientos rojos pendían en la pared blanca
Me he quedado mucho tiempo en esta casa
Nadie ha venido
Pero todos y cada uno de los días
La he esperado a usted
No he hecho nada
Quiero decir nada serio
(...)
Y así termina:
A mi casa tú vendrás
Pienso en otras cosas pero en realidad solo pienso en eso
Y cuando hayas entrado en mi casa
Te quitarás toda la ropa
Y te quedarás inmóvil desnuda erguida con tu boca roja
Como los pimientos rojos que cuelgan de la pared blanca
Y luego te tenderás y yo me tenderé a tu lado
Y ya está
A mi casa que no es mi casa tú vendrás.
Fotografía y traducción: nuria p. serrano, Índigo Horizonte 2010. Extracto de un poema de Jacques Prévert. Primera edición de esta entrada: Índigo Horizonte 2010. Reedición: Índigo Horizonte 2016.
Me he quedado mucho tiempo en esta casa
Nadie ha venido
Pero todos y cada uno de los días
La he esperado a usted
No he hecho nada
Quiero decir nada serio
(...)
Y así termina:
A mi casa tú vendrás
Pienso en otras cosas pero en realidad solo pienso en eso
Y cuando hayas entrado en mi casa
Te quitarás toda la ropa
Y te quedarás inmóvil desnuda erguida con tu boca roja
Como los pimientos rojos que cuelgan de la pared blanca
Y luego te tenderás y yo me tenderé a tu lado
Y ya está
A mi casa que no es mi casa tú vendrás.
Fotografía y traducción: nuria p. serrano, Índigo Horizonte 2010. Extracto de un poema de Jacques Prévert. Primera edición de esta entrada: Índigo Horizonte 2010. Reedición: Índigo Horizonte 2016.
Bello texto, no más que bello, sublime... Gracias por traducirlo,te quedó cadencioso y no perdió la fluidez de sus letras.
ResponderEliminarUn beso.
Bonjour Indigo,
ResponderEliminarMerci pour ce magnifique poème de Prévert!
Et la photo qui l'illustre me touche et me rappelle des images de mon pays...
Merci encore et très belle journée
Preciosos versos, muy bella poesía, gracias por traducírnosla, y acercarnos más a su autor.
ResponderEliminarBesos, feliz semana.
*...porque no fue previsto huir
ResponderEliminarsino abrazarse a la estancia*
( feliz tiempo!)
besos
Una hermosa poesía, me ha encantado, y la foto le va perfectamente.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Nuria.
Una evocadora imagen que no desmerece en absoluto el maravillo texto que la acompaña.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Núria
Una mirada a lo más alto. Una luz que asoma por la balaustrada y que casi alcanza a dejarnos ciegos y luego una espera. La espera de quien confía, una espera de quien sabe que esa casa que nunca es nuestra, se llenara de "cuerpos" desnudos al lado de los que solo queda descansar porque cuando lleguen, habra llegado la paz interior que siempre se espera.
ResponderEliminarMaravilloso como siempre Indigo. Un abrazo enorme
Gracias por darme a conocer este pomea, gracias.
ResponderEliminarYa sabes que no entiendo de fotografía, lo único que te puedeo decir es que me encantan todas. Un abrazo.
Me alegro de tu vuelta Nuria, aunque sea recordando entradas de años anteriores, no es una mala práctica, muchos de los que te siguen ahora no conocían tu blog en aquellas épocas y ahora pueden ver esos trabajos tan magníficos como el que nos muestras.
ResponderEliminarUn beso y seguimos adelante.