Claudia
Toda fotografía -como toda traducción- es una versión. Por eso, cuando tomamos la cámara para hacer un retrato, en el rostro del retratado también quedan reflejados la mirada del retratista y -si lo tiene- su imaginario. Para el mío, el rostro de Claudia tiene un no sé qué que queda balbuciendo. Aunque quizá esa solo sea mi interpretación.
¿Dónde acaba y empieza la versión?
È un vero mistero.
Et c'est bien comme ça.
En tout cas, grazie, cara.
Et bon voyage.
Los cánticos. También los imposibles, aun espirituales , balbucian
ResponderEliminarY en ellos, firme el rostro
Bss
Comparto plenamente tu reflexión sobre los retratos. Por cierto, exccelente éste de Claudia.
ResponderEliminarUn abrazo