Roald Dahl y la magia




Quienes no creen en la magia nunca la encontrarán.

Hay una pareja de golondrinas que lleva los seis últimos años haciendo el nido exactamente en el mismo lugar, en una cornisa de madera del cobertizo de las herramientas y, a mí, me sorprende verlas alzar el vuelo y recorrer en otoño miles de millas hacia el norte de África con sus polluelos y, luego, seis meses después, volver a encontrar su camino de vuelta y llegar al mismo cobertizo de madera en Gipsy House, Great Missenden. Es un milagro y hasta los ornitólogos más sabios del mundo siguen sin poder explicar cómo lo logran.

Texto original: Roald Dahl, en The Roald Dahl Treasury
Traducción al castellano: nuria p. serrano, Índigo Horizonte.
Primera edición de esta entrada: Índigo Horizonte 2010.
Reedición y fotografía: Índigo Horizonte 2016.

La entrada de hoy es la séptima y última "rescatada" de 2010: terminamos ese año con esa dama tantas veces olvidada y que, de improviso, vuelve y nos abraza. El próximo viernes, llegará 2011 y, con él, la primera de otras siete rescatadas.


Entradas populares de este blog

Carta a Josefa, mi abuela, José Saramago

Los verdaderos poemas son incendios, Vicente Huidobro

Respuesta, José Hierro

Para ser Grande, Ricardo Reis

Obsesión del Mar Océano, Mário Quintana