Al fin has de ver..., Mário Quintana
Al fin has de ver que las cosas más leves son las únicas
que el viento no logró llevarse:
un estribillo antiguo,
una caricia en el momento preciso,
las hojas deshojadas de un libro de poemas,
el olor que tenía un día el propio viento…
Traducción e imagen: nuria p. serrano, Índigo Horizonte 2011-2012.
Poema original de Mário Quintana.
Y unas palabras de poeta a poeta: cuentan que Mário Quintana, a veces, se ponía triste y se quedaba enclaustrado unos días en el piso de Porto Alegre donde vivía. Y cuentan que un poeta amigo, cuando lo intuía, atravesaba la ciudad y dejaba al portero del edificio en que Mário vivía, libros, cartas y quindins (que son unos exquisitos dulces portugueses). No intentaba subir ni hablar con su amigo Mário; silenciosamente le dejaba esas pequeñas cosas con olor y sabor a compañía.
Poema original de Mário Quintana.
Y unas palabras de poeta a poeta: cuentan que Mário Quintana, a veces, se ponía triste y se quedaba enclaustrado unos días en el piso de Porto Alegre donde vivía. Y cuentan que un poeta amigo, cuando lo intuía, atravesaba la ciudad y dejaba al portero del edificio en que Mário vivía, libros, cartas y quindins (que son unos exquisitos dulces portugueses). No intentaba subir ni hablar con su amigo Mário; silenciosamente le dejaba esas pequeñas cosas con olor y sabor a compañía.