Corpo no mar, Cecília Meireles
En agradecimiento a Tania
Agua densa del sueño, ¿quién navega?
Contra las auroras, contra las bahías:
barca inmóvil, estrella ciega.
Bate el viento en la vela y no la cimbrea.
- ¡No fue por mí!
Se partirán los amarres, rodarán los mástiles,
los remos se adentrarán en la arena...
Se torcerán los remos, y trazarán raíces.
- Inútil forzarlos – se arrastran, huyen
en la sombra secreta de eternos países...
¡Se tornó la vela en nube clara!
Llorarán mis ojos, mis manos correrán...
- ¡Alto y lejos! – No fue por mí...
Y apenas para
un cuerpo en la barca vacía,
a merced de las metamorfosis,
ojos virtiendo melancolía...
El viento sopla en el corazón.
¡Adiós a todos los meridianos!
Yago en un cajón.
Sobrevive el mar en mi oído...
«¡Marinero! ¡Marinero!»
(Islas... Pájaros... Puertos... – ese ruido,
- ¡El mar... El mar!... ¡El mar entero!...)
¡Mas es tiempo perdido!
Índigo (nuria p.serrano) de las imágenes y de esta versión de un poema de Cecília Meireles, Viagem, 1939.
a vida que foi se eternizar no mar da poesia... amo cecília. bom dia, índigo! beijinho.
ResponderEliminarFico tão feliz que tenha gostado de Cecília Meireles, seus versos me comovem há tanto tempo.
ResponderEliminarE a sua tradução é, como sempre, muito sensível, feita com alma lírica.
Uma bonita semana para você, querida Indigo.
E abraços!
Acabo de descubrir tú blog, con tú permiso me quedo un ratito por aquí, te volvere a visitar. Un saludo
ResponderEliminarhttp://fotos-trini.blogspot.com/
Un estupendo poema sobre la vida y la naturaleza, a veces olvidamos que nosotros también pertenecemos al medio natural y este poema nos lo recuerda de una forma exquisita. Besos.
ResponderEliminarBonito blog el que tienes....muy calido.
ResponderEliminarSeguro volveré.
Saludos.