Humedad, esencia, larva



Cuando a la soledad del nombre que nunca pronuncio le crecen alas, mueve horizontes, arde lleno de savia y expande la mirada. Entonces, esa soledad de cuyo nombre no quiero acordarme se hace humedad, esencia, sudor y nácar. Yo digo: libélula. Ella dice: larva.



Cuando al vientre del túmulo que ella cobija le aturden las alas, vuelve, vago, manso, suave, el machacón recuerdo lejano: morimos cada noche en lo más hondo de nuestro lecho y algunas noches renacemos al izarnos. Otras, en cambio, caminamos por el día como si fuésemos ese muerto que debió quedar en el lecho. Agazapado. Y llueve. Nos llovemos. De voraz llovizna y fango.




nuria p. serrano, ÍndigoHorizonte 2013, de trazos e imágenes.

Comentarios

  1. MAGISTRAL TEXTO, QUE INCITA A EXTERIORIZAR GRITOS!!!!!! FOTOS QUE INSPIRAN.
    BESOS

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  2. Las fotos son realmente geniales pero, de cualquier modo me tengo que quedar con ese texto que he leído una y otra vez hasta que se ha clavado en mi mirada y más adentro.
    Un abrazo enorme.

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  3. que preciosidade de palavras em acordo com essas mãos plenas de nascimentos e mortes da fotografia. muita delicadeza nos oferas, índigo. grande abraço!!

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  4. Magnifico trabajo,Nuria.Has comvinado muy bien las imagenes con el texto,que dicho sea de paso,es muy bueno.

    Un abrazo!!!

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  5. ¿Puede la soledad, alada y libre, convertir el día a sus antojos? ¿Pueden coexistir la noche y el canto en una sola pieza bajo la llovizna?
    Sí, definitivamente, después de leer esto, lo creo.
    Abrazo.

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  6. Una prosa poética exquisita, existencialista y muy sensual al mismo tiempo. Muy bonita larva, veo que no te dan miedo los bichitos. Besos.

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  7. Bonito y sugerente trabajo.
    Un abrazo.

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  8. Decía oasis de paz porque así lo siento, tu casa debe ser puro trino de aves mansas.

    Un beso.

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  9. La esencia, algo tan sencillo que con frecuencia se nos escapa... Besos.

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  10. Algo tan pequeño y tan frágil, se siente desde aquí es fuerte. Y da temor.

    Abrazos.

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  11. Me ha conmovido,Nuria. Existencialismo y profunda, no conocía esta faceta tuya

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Entre la palabra y el silencio, el sosiego.

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